
Para Cemin, la seguridad y salud de sus trabajadores y contratistas son valores esenciales e intransables, que rigen su actuar diariamente. En el marco de su meta “cero accidentes”, Cemin estableció las “10 reglas esenciales por la vida”.
Se trata de normas de comportamiento no negociables en materia de seguridad, que regulan aspectos esenciales para la protección de la vida. Debido a su importancia en el resguardo de las personas, su incumplimiento tiene consecuencias disciplinarias ejemplificadoras, llegando incluso al despido.
Las reglas esenciales por la vida son:
- Nunca ejecutar cualquier tarea sin utilizar los elementos de protección personal (EPP) correspondientes.
- Respetar las señalizaciones o disposiciones de seguridad, especialmente las prohibiciones o restricciones de acceso (conos, cenefas, letreros y barreras duras).
- No conducir vehículos o equipos sin prestar atención a las condiciones del tránsito y del terreno, o sin respetar la reglamentación vigente.
- Nunca ubicarse en la “línea de fuego” de caída de roca, carga suspendida, tronadura, proyección de materiales y de partículas incandescentes, o directamente en la trayectoria de desplazamiento de vehículos y equipos.
- Se prohibe utilizar materiales y/o herramientas en mal estado, herramientas hechizas o usarlas con fines distintos de aquellos para los que fueron diseñadas.
- Nunca trabajar en altura sin un sistema de protección contra caídas (arnés, puntos de anclaje, colas y accesorios de protección contra caídas).
- Está prohibido no respetar un bloqueo o intervenir sistemas eléctricos o mecánicos energizados o equipos en movimiento.
- Nunca presentarse al trabajo bajo la influencia del alcohol o substancias psicoactivas o intoxicantes.
- No operar sin autorización equipos o vehículos que requieran un permiso específico.
- Nunca anular o desactivar cualquier dispositivo de seguridad y/o protección a las personas.
Las reglas esenciales por la vida han sido dadas a conocer a todo el personal de la empresa, a través de las jefaturas directas y la firma de una carta de compromiso donde se da cuenta del conocimiento y el compromiso de cumplimiento.